lunes, 6 de diciembre de 2010

Lo que descubrió la Embajada acerca de la revista Noticias


Cuando se dió a conocer la filtración de cables diplómaticos de las embajadas y su publicación en internet por Wikileaks, no me sorprendí. Era la confirmación de lo que suponía desde siempre y que Hollywood había retratado, por ejemplo, en la saga de Bourne.

Tampoco me sorprendí cuando Hillary Clinton llamó a Cristina y lamentó la divulgación de los cables. Si me hubiera sorprendido que hubiera pedido perdón por espiar, pero bueh, ya sé hace rato que los reyes magos son los padres.

Y menos aún, fue sorpresa, el aprovechamiento de la filtración por parte de los dos diarios de mayor tirada en el país para pegarle al gobierno (por supuesto, no pusieron en tapa que se trató de "sensacionalista" al diario La Nación y los conceptos de Vilma Martínez sobre Mauricio Macri).



Me divirtió bastante leer en el Página 12 de ayer (Domingo 5/12/10) una nota al pie de página en la que Shannon Farrell, encargada de prensa de la Embajada norteamericana en Buenos Aires, declara que es "totalmente falso" el artículo de la revista Noticias titulado "Qué descubrió la Embajada sobre Cristina" y que George Kenny, señalado como quien cumplió con informar a Washington, no existe, y no ha trabajado en la Embajada.


Farrell en una entrevista radial, lamentó la situación generada por "una persona o empresa que tiene agenda contra el gobierno argentino o contra nosotros y quiere seguir inventando cosas para complicar la relación" entre Argentina y Estados Unidos.


El que dió en la tecla, es mi amigo Curupí, quién dice que para que vamos a leer los cables, que están en inglés, que mejor leamos que dicen al respecto Clarín, La Nación, Perfil e Infobae, así "nos indignamos rubiamente y sin esfuerzo".




Lo que sí me causa sorpresa, es que aún haya argentinos que sigan comprando la revista Noticias y los diarios Clarín y Nación.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Hecho en Argentina



Una empresa argentina desarrolló un hilado de cobre con el que se elaboraron medias que fueron utilizadas por los 33 mineros chilenos durante los días que estuvieron atrapados a 700 metros de profundidad. El desarrollo tecnológico nacional evitó que a los mineros se les infectaran los pies, a pesar de las condiciones de calor y humedad que existían en la profundidad de la mina.

“Sin la ayuda del gobierno nacional en el freno de las importaciones de
China nunca hubiéramos podido realizar este desarrollo tecnológico”, dijo Ignacio Curi, director de comunicaciones y finanzas de MAFFISSA, tras mantener una entrevista con la ministra de Industria, Débora Giorgi. Allí anunció un plan de inversión para la empresa por $50 millones para la producción de fibra, poliéster y polietileno y otra inversión para desarrollar geotextiles, un elemento que se utiliza en la industria de la construcción, que podría financiarse a través del Fondo del Bicentenario. La empresa emplea hoy a 550 operarios y, de concretarse la inversión, podría aumentar su plantel de personal en 120 nuevos puestos de trabajo.

Los mineros recibieron sus primeras provisiones recién a los 18 días de producirse el derrumbe y una de las preocupaciones de los médicos era el grave riesgo de infección que corrían al estar sometidos a condiciones de encierro con calor y alta humedad.

Por eso, entre las provisiones que el gobierno chileno les dio, había pares de medias con un Hilado Antibacteriano de Cobre que se desarrollaron en conjunto la empresa argentina MAFFISSA (Manufacturas de Fibras Sintéticas SA), que tiene su planta en La Plata, provincia de Buenos Aires, y la estatal chilena Codelco, a través de su empresa Cuprón. Este hilado tiene propiedades antibacterianas certificadas en laboratorios de Israel y Estados Unidos y cuenta con el respaldo científico del International Copper Association y los mineros, al utilizar estas medias, salieron de su encierro –que duró 70 días- sin infecciones en los pies gracias a la utilización de esta prenda.

El hilado antibacteriano es una tecnología completamente nueva. Las primeras muestras se fabricaron en La Plata en julio 2010. En agosto se tejieron las primeras medias en Chile y el gobierno de Sebastián Piñera decidió enviarlas a la mina con la idea de proteger a los 33 mineros de infecciones en los pies que usualmente se generan por la exposición constante a la elevada temperatura y humedad.

“Los médicos que revisaron a los mineros luego del rescate quedaron sorprendidos. Ellos esperaban infecciones graves en los pies, sin embargo, no encontraron ningún indicio, sí en otras zonas del cuerpo”, dijo Curi.

La relevancia de este hilado es que por contacto directo en menos de 2 horas elimina el 99,9% todas las bacterias que causan infecciones en los seres humanos y, además, mantiene esta propiedad luego de sucesivos lavados.

“La clave de la innovación consiste en el desarrollo de un gránulo con cobre y otros químicos llamados Masterbach de Cobre que se funden con polímeros sintéticos y se forma el hilado antibacteriano de cobre, ya sea de poliéster, nylon o polipropileno. El hilado antibacteriano emana iones que penetran en las membranas de las bacterias y las destruye prácticamente en su totalidad, superando otras tecnologías utilizadas hasta el momento en el mundo como, la plata o los aditivos químicos. La plata puede tardar días en eliminar porcentajes menores de bacterias y las propiedades de los aditivos químicos se diluyen con los lavados”, explicó.

La utilización cotidiana del Hilado Antibacteriano de Cobre puede salvar vidas. La tercera causa de muerte por enfermedades en el mundo son las infecciones intrahospitalarias y la implementación de este hilado en sábanas, recubiertos y ropas médicas puede reducir significativamente las infecciones mortales en los pacientes.

Incluso, sirve para proteger zonas del cuerpo sensibles, por ejemplo los pies en personas que sufren de diabetes o en la formación de hongos en deportistas. El costo de incluir estos hilados en diferentes prendas textiles como ropa interior, sábanas o toallas es relativamente bajo y en el país ya se están realizando pruebas con la firma Eseka, que tiene las marcas Dofour y Cocot.

MÁS INVERSIONES

En tanto, los dueños de la empresa argentino-uruguaya Entre Ríos Crushing, del sector agroindustrial, anunciaron una inversión por $ 86 millones para la construcción de una planta de biodiesel en el parque industrial de Gualeguaychú.

Los empresarios se reunieron con la ministra Débora Giorgi, quien puso a disposición del emprendimiento la lía de créditos del Fondo del Bicentenario, a una tasa del 9,9% en pesos fija anual y 5 años de plazo y hasta 12 meses de gracia.

La empresa es un emprendimiento binacional, con un 80% del capital accionario en manos uruguayas y el 20% restante en manos argentinas. El presidente de la compañía, Martín Echeguía, junto al director de la empresa, Ricardo Zerbino, explicaron a la ministra los alcances de la inversión para incorporar más valor agregado a la cadena oleaginosa, ya que la empresa hoy procesa 1.000 toneladas diarias de soja para elaborar aceite de soja, harina y pellets.

“El fuerte proceso inversor que se está desarrollando en el país demuestra que la argentina industrial es posible con la articulación de políticas desde el Estado y el acompañamiento financiero para proyectos que generan valor y crean más trabajo argentino”, dijo Giorgi.

Buenos Aires, 26 de noviembre de 2010.


http://www.industria.gob.ar/?p=5092